martes, 2 de agosto de 2011

Abandono Total, Recompensa Celestial.


Mateo 10:37-42 “El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí;  y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará. El que a vosotros recibe, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió. El que recibe a un profeta por cuanto es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a un justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá. Y cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.”

Jesús, nos enseña como para que realmente vivamos conforme a su palabra debemos ser personas que no tengamos gusto por lo material, incluso por lo sentimental, nada es más importante que nuestro buen Padre Celestial, todo el que decide poner a papá, mamá, herman@s, hij@s, espos@, amig@s por encima del amor de Dios, no es digno de entrar en el reino de los cielos, Mateo 16:24-25 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, la hallará., tomar la cruz, dejando como segundo plano todo, incluso nosotros mismo, no tenemos valor si solo nos
fijamos en material de lo sentimental por que perdemos nuestra alma, nos volvemos cautivos de las cosas que pasan que se acaban, pero si nuestra prioridad es Dios, es su mandato, ganaremos mucho más que eso Lucas 18:29-30 “Y él les dijo: De cierto os digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o padres, o hermanos, o mujer, o hijos, por el reino de Dios, que no haya de recibir mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.”, bueno no quiere decir que abandonemos literalmente la familia, solo que le demos el lugar que corresponde en nuestro corazón, siempre la prioridad es Cristo.

Todo el que recibe a un hombre de Dios, a un hijo del reino, recibirá una recompensa de Dios, debemos hacer el bien a todos, Jesús nos enseño amarnos Juan 13:34 “Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.”, Jesús nunca discrimino a nadie, por tanto demos de comer al hambriento, al débil brindémosle protección, al enfermo cuidémoslo, seamos misericordiosos, si tu hermano necesita de ti ayúdale, dice la palabra de Dios en Proverbios 19:17” A Jehová presta el que da al pobre, Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar.”, te imaginas, cuando le das al pobre, le presta un servicio, le das una ayuda le estas prestando a Dios te imaginas, y sabiendo que El es dueño de todo, cuanto te pagara luego, por eso quiero que aprendas como recibir una Recompensa Celestial:

1-    Prioridad: Dale la prioridad solo a Dios, en tu corazón, que nadie ni nada te saque del propósito de Dios, que no te importen las dudas de otros, que te digan religioso, evangélico, no importa a ti te debe importar agradar a Dios. Abandona todo lo que sea tropiezo para amar a Cristo. Abandonando totalmente todo lo tuyo.
2-    Compromiso. Asume compromisos con Dios, se obediente, busca su palabra, esto te acercara más a su presencia. Déjate guiar por Dios, somete tu ego a la voluntad de Dios, se una persona comprometida con Dios.
3-     Generosidad. Se generoso con tus hermanos, con todo aquel que tu puedas brindarle una ayuda, sin esperar nada a cambio, pero hazlo con excelencia dice la palabra que el que da un vaso de agua, pero hace énfasis agua fría, no cualquier agua, entonces trata a quienes tu ayudas con lo mejor como trataría a Cristo si estuviera enfrente tuyo Filipenses 2:3 “Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;”.

Practica estos tres aspectos y veras como recibes una recompensa de Dios, la cual nunca hubieras podido imaginar.

Abba Padre, hoy te necesito, quiero abandonar todo lo material y  sentimental, por eso te entrego mi vida, te pido Jesús que tomes el trono de mi corazón y que entres en el, quiero que seas mi Señor y Salvador, perdona mis pecados, haz conmigo tu voluntad, gracias por el perdón y el amor, en Jesús de Nazaret, Amen


William González Velasco.
M.P.N.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario