Marcos 6:4 “Mas Jesús les
decía: No hay profeta sin honra sino en su propia tierra, y entre sus
parientes, y en su casa.”
En el plano natural siempre el hombre está buscando un
reconocimiento por lo que hace y es normal cuando son asuntos de trabajo,
negocios o en investigaciones, proyectos en fin ciertas tareas se hacen porque además
de un reconocimiento público se espera es una recompensa económica.
Nuestro
amado Señor Jesucristo solo hacia las cosas que el Padre le comisiono, pero se encontró
en Nazaret su propia tierra, la más grande incredulidad solo porque ellos veían
al hijo de José y María, sus mentes no daban para mas, por permanecer junto a
Él
durante su niñez y juventud, se acostumbraron a verlo, y no valoraban la sabiduría
y su gracia y madurez, no quisieron atender sus palabras.
Cuando
nosotros hacemos algo que nos ha sido encomendado pues dispongamos nuestro ser
completo para hacerlo de la manera más excelente, la palabra de Dios dice que
todo cuanto hagamos lo hagamos como para Él, y el Señor Jesucristo nos enseña
que si alguien nos pide caminar una milla nosotros caminemos con aquel una
milla mas, esa milla es la excelencia, es hacer todo con amor con pasión pues a
quien tu le sirves es al Padre que está en los cielos.
Nunca
busquemos reconocimiento en medio de los mismos que han estado a nuestro lado,
quien da reconocimiento es solo Dios, nunca hagamos algo buscando que otros
reconozcan nuestro esfuerzo, debemos hacer todo para agradar a Dios, siempre
haciendo todo para El, trabajemos con excelencia, estudiemos con esfuerzo, oremos
una vez más como nunca antes, ordenemos nuestros asuntos, optimicemos nuestro
tiempo, quizás nadie nos vaya a dar una recompensa o tampoco nos felicite, ni tan
siquiera recibiremos una palmada en la espalda, pero aprendamos a gozarnos sabiendo
que Dios está feliz y El nos dará la recompensa, los mejores tiempos vienen
para tu vida no renuncies cuando ya estas llegando a la meta.
Recuerda
que solo Dios es quien da el pago por nuestra excelente manera de vivir, seamos
unos benditos incansables en todo cuanto hagamos, pues la recompensa viene,
nunca se tarda, ella llega justo en el tiempo indicado, tranquilo que Dios
nunca se queda con nada, tus bendiciones y el fruto de todo lo que haces hoy se
está gestando en los cielos, por que recuerda que tu Padre es Dios, el dueño
del oro y la plata, de toda la tierra y su plenitud, entonces será que dejara a
sus hijos en vergüenza?, lo dudo, Dios es perfecto, si estabas diciendo ¿Dónde está
mi recompensa?, yo te digo Dios ya la envió espera ya está por llegar, aleluya.
Dios los
siga bendiciendo
William González Velasco.
M.P.N.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario