Mateo 11:28 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.”
Cuando llegamos a casa después de una jornada estresante, un día lleno de trabajo, de cargas y al final de esta jornada no nos queda más que el alma abatida y quizás sin fuerzas para continuar al día siguiente. Con frecuencia nos sucede esto, mas hoy día cuando a nuestro alrededor los “aceleres”, el afán diario, los compromisos, nos quitan la paz, la calma.
En la sabiduría de nuestro Dios, la palabra de hoy, nos llama al descanso, Jesucristo a todos los que de alguna manera tenemos el día lleno de cosas por hacer, o sin hacer, de pensamientos y cargas que nos quitan la calma, nos invita primero a buscarle, “Venid a mí”, y nos promete descanso en El, debemos colocarnos en sus manos.