Mateo 12:34-36 “¡Generación de
víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia
del corazón habla la boca. El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca
buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. Más yo os digo que de toda palabra ociosa que
hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.”
Podemos
tener dos botellas idénticas de hermoso vidrio y talladas a mano, pero si en
una tengo leche y en otra tengo veneno, la segunda ya no me parece tan
llamativa, su figura y apariencia no mejorara nunca su contenido, por esto la
primer botella será más agradable y deseable que la segunda, su contenido
cambiara drásticamente su valor.
El Señor
Jesucristo, reprende a los fariseos por tantas cosas que ellos decían y murmuraban
de sus
obras y de sus discípulos, los fariseos nunca vieron lo bueno, permanecían
buscando los errores o las faltas del Señor Jesucristo. Por tanto el Señor Jesús,
les dio a entender a todos que por mucho que intentaran de ser santos por
fuera, lo que más importaba era todo lo que tenían guardado en sus corazones.
De que
hemos llenado nuestros corazones?, esa es la pregunta que hoy debemos resolver,
y algunos empezaremos a notar que de muchas cosas que no son nada buenas,
tendremos odios, rencores, amarguras, tristezas, desconfianza, dolor, temores,
heridas aun abiertas, saldrán cosas buenas de nuestros corazones?, hablaremos
palabras de bendición?.
Un corazón
lleno de malos tesoros, nunca nos dará felicidad mucho menos será capaz de
brindar felicidad y amor a otros Proverbios
15:13 “El corazón alegre hermosea el rostro; Mas por el dolor del corazón el
espíritu se abate.”, en nuestro rostro también se refleja el tesoro que
tenemos guardado en el corazón.
Mis
malos pensamientos, mis malos deseos, las malas conductas, almacenan en el corazón
tesoros de maldad, por eso con solo la manera de una persona hablar o
expresarse da a conocer lo que tiene dentro en su corazón, pero a su vez se
alimenta de lo mismo que habla Proverbios
18: 20 “Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del
producto de sus labios.”, de que cosas estamos entonces alimentando nuestro espíritu?,
así es como solo atraemos la maldad a nuestra vida, negativismo, pesimismo,
tragedia, miseria, todo porque de lo que hablamos de eso mismo nuestro corazón sigue
siendo lleno.
Que
debemos hacer para cambiar y acabar con este ciclo de vida lleno de malos
tesoros?, veamos que nos enseña Dios en su palabra para corregir nuestra
conducta.
1 Descubriendo mis tesoros:
Debo reconocer ante Dios que mis tesoros son de maldad, tesoros de tristeza, de
egoísmo, de odio, de amargura, de rabia, de envidia, de incredulidad, soy lo
que tengo en mi corazón, Proverbios
23:7a “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.” Debo empezar a vaciar mi corazón pedir perdón a quien
debo pedirlo, sacarme todo ese dolor de dentro, amargura, envidia, y si no es
posible ante la persona misma, hagámoslo en el espíritu pero agotemos todos los
recursos para reconciliarnos y así poder pedir perdón sincero a Dios por toda
la maldad que teníamos.
2 Limpiando el Corazón: Mi corazón
solo se limpia si permito que sea el Señor Jesucristo el que entre en el y me
transforme en un buen hijo de Dios, su amor será implantado en nuestra vida y
el corazón nuestro será puro, amamos a todos como Dios nos enseña y nos manda, Levítico 19:18 “No te vengarás, ni guardarás
rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo
Jehová”, y Juan 13:34 “Un mandamiento nuevo os doy: Que os
améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.”
3 Cambia tu lenguaje: Tus
palabras son proyectiles que impactan en el mundo espiritual y también alimentan
tu corazón, si quiero que algo cambie debo empezar por mi lengua, dice la
palabra en 1 Pedro 3:10 “Porque: El que
quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios
no hablen engaño;”, todo el que quiera tener buenos días en su vida debe
cuidar de que habla, recordemos que Jesucristo también les dijo en la palabra
del tema de hoy en el versículo 36 que daremos cuenta a Dios de toda palabra
ociosa que salió de nuestra boca, una palabra mía puede dar vida o dar muerte Proverbios 18:21 “La muerte y la vida están en
poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos.” De la misma palabra que doy a mi hermano o mi prójimo de
esa misma comeré, créeme doy testimonio de esto por mi propia experiencia.
Amados
cambiemos el contenido de nuestros corazones y así mismo cambiara nuestra vida,
seremos personas agradables para todos, siempre querrán hablar con nosotros y
Dios bendecirá nuestras vidas por que tenemos en nuestro corazón a su Hijo
Jesucristo, quien nos gobierna con el amor que el Padre deposito en El, recibe a
Jesucristo hoy y veras como sentirás descanso en tu alma, repite con voz
audible “Amado Dios, te necesito, quiero
que me perdones todos mis pecados, saca de mi corazón todo lo incorrecto, te
suplico Señor Jesús que entres en el y seas el Único Señor y Salvador, haz de
mi una nueva persona conforme a tu voluntad, escribe mi nombre en el libro de
la vida, recibo tu amor, el perdón de mis pecados y la vida eterna, gracias
Padre en el nombre precioso de Jesús de Nazaret, Amen”. Hoy Jesucristo
entro en tu corazón, y ahora es tu más precioso tesoro, conoce más del Señor y
de su palabra, te invito a leer la biblia todos los días y descubras las
promesas de Dios para tu vida.
Dios te
bendiga.
William González Velasco.
M.P.N.
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