Déjame Ver La Cruz.

Isaías 53:2 “Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos.”

El Profeta Isaías en todo el capitulo 53, revelaba en esa época la manera como el Mesías, el Redentor padecería por nuestros pecados, en la cruz del calvario el Hijo de Dios, fue expuesto ante todos y le vieron golpeado, maltratado, herido, desfigurado, sangrando todo su cuerpo molido por los azotes y la

crueldad de los romanos, de fariseos de judíos y de todos los que le perseguían.

La obra redentora de la cruz del calvario, expuso al Señor Jesús sin belleza, su hermosura fue borrada, por la atrocidad con la cual fue sometido, y todo por que El quiso cargar con nuestras culpas, nuestras enfermedades Isaías 52:14 “Como se asombraron de ti muchos, de tal manera fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura más que la de los hijos de los hombres,”. Todos sabemos que el Señor Jesucristo es de hermoso parecer, dice de Él en Salmos 45:2 “Eres el más hermoso de los hijos de los hombres; La gracia se derramó en tus labios; Por tanto, Dios te ha bendecido para siempre.”, sin embargo los soldados romanos crueles y despiadados, utilizados por Satanás, se ensañaron contra Jesús.

Por eso hoy quiero invitarte a que en oración inclinado ante la presencia de Dios, pídele que te permita ver la cruz del calvario, traigamos a memoria un momento que quizás de primera vista es aterrador, pero también veamos la hermosura del amor con el cual Dios mismo expuso a su hijo a semejante atropello, su amor nos dio la vida, la oportunidad de vivir en este mundo, la obediencia de Jesucristo, lo ayudo a soportar todo el dolor por el castigo que realmente mereceríamos nosotros, el cargo ciertamente una cruz hasta el monte, pero allí estaba el tomando nuestras cargas, nuestras rebeliones, aun las que tú o yo cometeríamos en nuestro tiempo, magnifico nuestro Salvador el Señor Jesús.

Cuando tengamos esas ideas de que somos merecedores de nuestra vida, de lo que tenemos y de todo aquello que vivimos, recordemos lo que soporto nuestro amado Señor para que pudiéramos ver la luz del alba, El mismo soporto todo, se convirtió en cordero de sacrificio, dice la escritura que Jesucristo fue hecho maldición por nosotros Gálatas 3:13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), todo lo que recaería sobre nosotros no fue así por que El lo asumió como único culpable de todo, sin haber conocido pecado alguno, pues el varón perfecto santificado, fue el que pago todas nuestras deudas.

Llevemos todas nuestras culpas todos nuestros pecados, a la cruz del calvario, para que podamos morir a tanto pecado, a tanta mala idea y pensamientos, a tantas palabras malas que comúnmente decimos, seamos humildes, en oración llevemos todo esto a la cruz del calvario, allí donde le Señor Jesucristo, murió por todos, y aun antes de su ultimo respiro, pidió perdón por todos, Lucas 23:34 “Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes”, ninguno de nosotros sabemos lo que hacemos cuando, nos odiamos unos a otros, cuando nos perdemos en medio de vicios y adiciones, en inmundicias sexuales, en adulterios, en las infidelidades no solo a la pareja sino al amor de Dios, queremos que Dios nos ayude, nos bendiga, cambie nuestras malas situaciones, las adversidades, pero que estamos dejando en la cruz, si estamos muriendo a las cosas por las cuales Jesucristo mismo sufrió y murió, pero que para gloria de su nombre y para salvación nuestra resucitó.

Amados hoy los invito a que en la cruz veamos, como la hermosura de Jesús fue borrado a causa de nuestras propias culpas, digámosle a Dios, yo valgo ese sacrificio, yo lo valgo Señor Jesús y te lo voy a demostrar.

William González Velasco.

M.P.N.