viernes, 19 de agosto de 2011

Una Intercesión De Alto Nivel.


Lucas 22:31-32 “Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos..

Anuncia Jesús a Simón, que Satanás le pidió autorización al Padre para someterlo a tentación y prueba, que curioso Satanás pidió permiso antes  de ir a tentar a Simón y la autorización le fue concedida, quiere decir que Dios se lo permitió, es claro que Satanás no puede acercarse a nosotros mientras que tengamos una relación estrecha con Dios, solo puede hacerlo si nosotros mismos lo permitimos o Dios lo hace. En el antiguo testamento vemos como Job hombre temeroso de Dios tenia protección sobre él y sobre todo lo que tenia, Job 1:10-12 “Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde?. ¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra.  Satanás le dice a Jehová que lo “ha cercado”, Job también había
sido contemplado por Satanás para oprimirle pero no podía acercársele por que estaba bien resguardado.

Cuando tú tienes una estrecha relación de Fe con Dios y con tus pensamientos, palabras y obras no haces otra cosa diferente a alabarlo y darle siempre honra por todo lo que te bendice, el Diablo también empieza a verte como un objetivo deseable, es por eso que Simón quien era tan determinante en sus acciones con Jesús, fue objetivo de Satanás para tentarlo entonces pide permiso a Dios para hacerlo así como cuando pidió permiso para oprimir a Job Job 1:11-12 “Pero extiende ahora tu mano y toca todo lo que tiene, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia. Dijo Jehová a Satanás: He aquí, todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él. Y salió Satanás de delante de Jehová.”.

Jesús se convierte en ese momento en el Intercesor de Simón (Pedro) ante el Padre “pero yo he rogado por ti, imagínate tremendo abogado que tenía Pedro, el mismo Jesucristo en ruego, en oración, intercedió por Pedro para que en ese momento de adversidad, de contrariedad, de opresión, de ataque por parte de Satanás a Pedro no le faltara la Fe “que tu fe no falte”, pero después le profetiza con una promesa “y tú, una vez vuelto” y un mandato “confirma a tus hermanos”. Es tanto el amor de Jesús por sus hermanos, que se tomo la tarea de interceder por Pedro, aunque en ese momento Simón no se había apartado de su maestro, ni de sus hermanos, iba a ser sometido a dura prueba, pero era necesario que alguien pidiera al Padre que a Pedro no le faltara fe, confianza de buscar el perdón en su Señor, entonces después de la prueba Pedro se levantaría más fuerte en su fe, mas determinado a seguir el camino del Señor Jesucristo y esta vez seria de fortaleza para sus hermanos.

Cuántos de nosotros en medio de la aflicción, hemos llegado al Padre Celestial y oramos, y rogamos para que nos acuda, y Jesús mismo como nuestro Intercesor, como nuestro abogado, llega al Padre y le recuerda que su sangre fue derramada por nosotros, que no nos falte la fe, Cristo intercede para que Dios mismo nos afiance en la Fe. Cristo mismo venció todo poder satánico que pudiera dañar nuestra vida pero nos recuerda que tendremos días no tan buenos Juan 16:33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” Jesús te garantiza que de la prueba saldrás, si tienes fe en El y en el Padre que pelea también por ti, mientras estas en tiempo de prueba Dios está atento a que no te falte la fe, la promesa de Dios nos la confirma en el libro de Isaías 17:14a “Al tiempo de la tarde, he aquí la turbación, pero antes de la mañana el enemigo ya no existe.”  Dios promete que aunque tengamos adversidades en poco, nuestro enemigo dejara de existir.

Jesús hace su más grande esfuerzo, interceder por nosotros, está en nosotros tener fe en su palabra en la promesa de Dios que saldremos de tal situación, que el enemigo tendrá que huir de nosotros si somos obedientes a nuestro amado Padre. Santiago 4:7 “Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros.”.



William González Velasco.
M.P.N.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario